ELIGE MADERA ¿Te habías imaginado que el ingrediente secreto del vino podía ser la madera? Bien, no es precisamente un ingrediente más, pero si un elemento importante en algunas de las características o notas del vino que se esté probando. Bien, no es precisamente un ingrediente más, pero si un elemento importante en algunas de las características o notas del vino que se esté probando. Las barricas no siempre fueron la herramienta para almacenar el vino, su uso se popularizó junto con el transporte marítimo siglos atrás. En el almacenamiento del vino en embarcaciones no se consideraba el tiempo de traslado ni las posibles alteraciones que podía sufrir con el clima, llegando a destino con un resultado diferente. En ello se observó que el vino absorbía las características de la madera que lo contenía. Hoy por hoy, están hechas usualmente de madera de roble, también de castaño o alerce, más común en Chile, cualquiera sea el caso, cada tipo de madera aporta cualidades que enriquecen el resultado del vino y no aleatoriamente, los enólogos encargados del arte de la producción de esta bebida seleccionan cuidadosamente el tipo de barrica que requiere cada cepa. Entre los efectos de las barricas de madera en la producción de vino podemos nombrar 3 más perceptibles: 1. Color La madera con el tiempo desprende taninos de su corteza, que reaccionan en contacto con el líquido y aumentan su pigmentación, más apreciable en los tintos. 2. Aroma Entre los aromas que se detectan en el vino, podemos sentir esencias afrutadas, de vainilla o similar a la miel o el café, esto depende del tratamiento de la madera de cada barrica. 3. Gusto Las barricas de madera contribuyen en la microoxigenación del vino, regulando su sabor y cantidad de alcohol, además de aportar dulzor dependiendo del tipo de madera.