ALFONSO MOYA 

Son varios reconocimientos los que ha obtenido a lo largo de su carrera, entre ellos el Sello de Excelencia a la Artesanía chilena 2018, por su pieza “Ngen del Lago”, el sello de Excelencia a la Artesanía chilena 2019 por su pieza “Canterito del Llaima” o también el Reconocimiento de Excelencia del World Craft Council UNESCO, para productos artesanales del Cono Sur. 

El artista, originario de Cunco, ya desde los 10 años se vio atraído por el arte y la creación; desde muy temprana edad sintió ese llamado que lo impulsaba a transformar las cosas en algo más. Y cómo no dejarse llevar por esa voz de la naturaleza cuando se crece entre los parajes verdosos de la Araucanía, entre la magia ancestral y ese mundo misterioso lleno de ritos milenarios; es por eso que sus obras se ven inspiradas en los bosques, lagos, cordillera, en el viento y los volcanes. 

Su proceso de creación se basa en recolectar madera caída y la que traen los ríos, respetando así el ciclo natural del bosque para continuar con su consigna de “crear sin destruir”.  Este año expuso “El origen del viento”, una colección de 10 obras que retratan el vivir en la Araucanía andina, con toda su tradición cultural y su belleza. En sus palabras: “Con esta exposición se quiere trasladar la energía del viento y la cordillera de La Araucanía andina por medio de 10 piezas talladas en madera nativa, de manera que quienes la visiten reconozcan en ellas un territorio natural y espiritual, lleno de cultura y tradiciones”.

"Cantarito del Llaima", Premio Sello de Excelencia 2019 del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio. Tiene la forma de una gota de agua, pero a la vez representa un volcán, contenedor de agua y vida.  

"Ngen del Lago", Premio Sello de Excelencia 2018 del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, y Reconocimiento de Excelencia de la UNESCO 2017-2018.

EGON MUÑOZ

Egon Muñoz creció a los pies del volcán nevado Villarrica; fueron sus abuelos quienes decidieron establecerse en este lugar aún a pesar de las fulminantes erupciones que podrían haberlo destruido todo. Sin miedo y con una valentía digna de admiración, supieron adaptarse y convivir con la incertidumbre de la naturaleza, explorando entre las profundidades de los socavones que producía la lava y las nieves derretidas del volcán.

Escolar de una escuela rural en Candelaria, siempre vivió en sincronía con la naturaleza, recolectaba frutos silvestres de regreso a casa: murta, hongos, comestibles y digüeñes. Más tarde se titularía de técnico agrícola, pero siempre con su afición intrínseca hacia el arte: tallaba las maderas colectadas con los formones, mazos, gubias, sierras y prensas con la ayuda de su padre. 

Fue después, cuando se estableció en Pucón, que su atracción hacia la madera se volvería más plausible con el asentamiento de su taller en un local comercial. Desde aquí comenzarían a llegar los reconocimientos por sus obras únicas de tallas en madera de coihue azumagado o manchado por los hongos para dar el sello de madera vieja y milenaria. También, en el año 2017 y 2019 fue seleccionado para participar en el Bienal de Artesanía Contemporánea Revelations en París, Francia, además de ser invitado a participar en el Festival Internacional de Artesanía de Cuenca en Ecuador. 

 

Fuente de Coihue, Premio Sello de Excelencia 2016 del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, y Reconocimiento de Excelencia de la UNESCO 2015-2016.

Algunas piezas de Egon en el Salón de Artesanía y Creación Revelations 2017. 

Pieza de madera rescatada de roble precedente del río cautín.