Hay edificios de diseños rupturistas, algunos son increíbles y otros interrumpen la armonía del lugar en el que se encuentran, dejando una sensación de incomodidad, algo similar sucede cuando estas obras arquitectónicas se ubican en medio de la naturaleza, pudiendo llegar a afectar el ecosistema, el comportamiento de los animales y hasta la forma en que crece la vegetación.

Existen arquitectos y estudios arquitectónicos que se dedican a la creación de estructuras en hábitats naturales, que pasan desapercibidos, adaptados a la naturaleza circundante, consiguen mimetizarse a la vez que destacan por un diseño completamente funcional y armonioso.

Conseguirlo es una hazaña en el mundo de la arquitectura, y hacerlo de manera sostenible es la “guinda de la torta”, es por eso que hoy queremos deleitarte con estas construcciones en armonía con la naturaleza.

 

Metasequoia Grove

Un restaurante creado en torno a los árboles que lo rodean, recibe el mismo nombre de la especie endémica, se emplaza en la rivera del lago Taihu al extremo oeste de Shanwan Village, en el campo de Suzhou, China.
El diseño de las torres que constituyen su estructura, simula la figura de los árboles de metasequoia de la región, que son los que dan relieve al terreno llano. Inspirado en la forma del proceso generativo de la naturaleza, el restaurante está seccionado en módulos siguiendo un patrón piramidal de acuerdo con la relación proporcional 2:3:4.

Bajo la dirección del estudio arquitectónico Goa, el diseño de techo de las torres consta de tres capas, la primera forjada de paneles de aluminio perforado siguiendo la textura de las copa de los árboles de manera geométrica hacia el exterior, le sigue una capa de vidrio que favorece la luminosidad del interior, y finalmente una capa interior de paneles de madera.
En la construcción del restaurante se procuró adoptar una estrategia de maximización de la transparencia entre el interior y exterior, para ello se establecieron terrazas bajo el alero en continuación al lago, dando una sensación de extensión del espacio interminable, generando coherencia entre la arquitectura y el humedal. Para el interior se utilizaron ventanas de piso a techo que continúan con la extensión del terreno llano.

 

Casa Plana

Esta pieza arquitectónica se funde con el paisaje, siendo parte de la extensa pradera de Porto Feliz en Brasil, destacado por la fachada del techo que se asemeja al pasto y vegetación circundante, dando un sentido de continuidad que sigue la topografía del entorno.
La casa incluye áreas de salas de servicio, un gimnasio, salas de juego y cinco habitaciones con baño privado y salas de estar en sus extremos, que al abrir sus puertas transforman el edificio en una extensa terraza.
El interior del edificio está hecho de paneles y muebles de madera, según consigna el sitio Archdaily, los que son dispuestos para hacer habitaciones espaciosas y personalizadas. Las paredes exteriores del inmueble son cóncavas y convexas en algunos sitios, a modo dar continuidad al jardín, creando con los ladrillos filtros de luz con efectos cinéticos a medida que la luz del sol se desplaza.
Sostenida por pilares metálicos en forma de cruz, la azotea de esta casa cuenta con paneles solares y tragaluces que favorecen la eficiencia energética del edificio, así como su fachada verde que aporta al confort térmico de la casa.