En Francia, más precisamente el sector de Estrasburgo, se desarrolló recientemente un proyecto que se ajusta perfectamente al término de ecociudad, con una construcción residencial en madera que logró posicionarse como la más alta de dicho país, significando todo un hito en cuanto a edificaciones sostenibles. Este proyecto se enmarca en el contexto de un concurso de diseño y construcción para un nuevo desarrollo urbano orientado a la construcción sostenible y la arquitectura en madera, en el cual Nicolas Ziesel,  co-fundador de KOZ Architectes y arquitecto a cargo, decidió desarrollar el Sensation Wooden Block, una propuesta habitacional que consta de tres torres, 146 departamentos y más de 9 mil metros cuadrados. El hecho de que el edificio sea de tal altura no es cuestión de azar ni para alcanzar récords, para el arquitecto, esta cualidad es fundamental para aportar a la ciudad, el medio ambiente y la sociedad, según sus palabras: “Cambiar la industria de la construcción del hormigón, que es responsable del 8% de las emisiones globales de CO2, a la madera y otros materiales sostenibles, es una alta prioridad. Un cubo cuadrado de hormigón libera una tonelada de CO2 a la atmósfera, mientras que el mismo volumen de madera en la construcción almacena una tonelada de CO2.”

En cuanto a las materialidades del proyecto, éste tiene una fachada de madera laminada CLT pensada para lograr una mejor emisión de huella de carbono, pero también para estabilizar y darle menos esfuerzo a la cimentación considerando que la zona es propensa a la frecuencia sísmica. Además, este material permite una mayor flexibilidad durante toda la etapa de diseño y en la vida útil de lo construido; Ziesel señala que: “la madera es principalmente pino blanco de Austria para el CLT y varias especies de pinos de Francia para el glulam y otros elementos. También, hay algunos paneles OSB de origen europeo mixto”. Un dato no menor es que en el proceso de construcción se prendió fuego a una maqueta a escala real para probar su efectividad frente a incendios, lo que terminó en que el 90% de la maqueta resultara ilesa.  

Para Ziesel, el uso de la madera en la arquitectura vendría siendo un recurso fundamental a la hora de hablar de sostenibilidad, con el cual podríamos sensibilizarnos con los problemas globales,  cuidar mejor a las personas y a los seres vivos.